Nacemos y morimos solos. Quizá sea inevitable realizar esta transición también solo, pues, en cierto modo es una especie de mezcla de ambas cosas a la vez.

Lo único que lamento es que ahora mi chico también se queda sólo. Y el no está transicionando. No tiene la culpa de nada. Solamente pasaba por allí y se encontró enamorándose de la persona equivocada con el género equivocado.

Encima ha tenido la santa paciencia de leerse este blog para comprenderme un poco mejor (si no me entiendo ni yo…).

Lo siento mucho.